Entrega semanal de cajas de comida: Living Cully responde a la crisis de COVID

Mayra Torres, Organizadora Comunitaria de Living Cully, con dos voluntarios

Mayra Torres, Organizadora Comunitaria de Living Cully, con dos voluntarios

Se necesitan voluntarios para que el programa de entregas semanales de cajas de comida continúe. Si estás interesado en ser voluntario regular los viernes por la mañana ¡llena esta forma en línea!

Los efectos de COVID-19 se están sintiendo en las comunidades de todo el país. Mientras esta pandemia ha afectado negativamente a millones de personas, también ha mostrado la fuerza y resiliencia que las comunidades tienen, y su habilidad para unirse y ayudar a sus vecinos. La comunidad de Cully es un gran ejemplo, pues se ha puesto a la altura del desafío que la crisis de COVID 19 ha creado.

La pandemia ha dejado a muchos hogares de Cully sin trabajo o con jornadas significativamente reducidas. Muchas personas están haciendo decisiones difíciles entre pagar la renta, comprar comida, o cubrir otras necesidades básicas. Mayra Torres, organizadora de Living Cully, ya había estado trabajando por varios meses en una idea sobre entrega de comida en el vecindario, pero cuando la pandemia surgió, supimos que debíamos actuar “Hicimos una encuesta en la comunidad, y nos dimos cuenta de que había esta necesidad… desde antes de COVID-19. Pudimos conectar con NEFP y supimos que este era el momento de actuar”, dijo Torres.

Voluntario del Centro para el Ciclismo Comunitario con un remolque de cajas de comida para entregar

Voluntario del Centro para el Ciclismo Comunitario con un remolque de cajas de comida para entregar

Durante los último meses, personal de Living Cully, el Centro para el ciclismo comunitario (CCC), el Programa alimentario de emergencia del noreste (NFEP por sus siglas en inglés), y voluntarios de la comunidad se han reunido los viernes por la mañana en la iglesia luterana Luther Memorial para empacar cajas de comida para las familias en necesidad durante la pandemia. Durante ese tiempo, 26 voluntarios y personal han empacado más de 1650 cajas para distribuir semanalmente a 150 familias en el vecindario de Cully.

Para la residente de Cully, Queenie Samuel, el programa de entrega de cajas de comida llegó justo a tiempo “Estaba cocinando ya mi última lata de comida, y comiendo pan duro cuando el programa de comida apareció”, dijo Queenie. Queenie es una adulta mayor y vive con su perro. Debido a problemas de salud, no puede dejar su casa de manera regular para conseguir comida. El tener acceso a una variedad de comida sana entregada a su casa, que incluye verduras frescas, ha ayudado a Queenie durante este momento difícil. CCC ha entregado las cajas de comida de Queenie a su casa, en bicicleta. Cuando se le preguntó sobre el impacto que el programa ha tenido para ella, Queenie afirmó “El impacto fue enorme… y todos han sido tan amables”.

Las cajas de comida han proporcionado un alivio muy necesario para muchas familias en Cully. El ayudar a preparar y entregar las cajas también ha sido una experiencia positiva para muchos en la comunidad.

Muchas personas de la comunidad que han sido voluntarios en el programa de cajas de comida también han recibido una caja semanal. Para Maira Galindo, involucrarse ha sido una experiencia empoderante “¡Ha sido genial! Me he sentido bien haciendo esto, sabiendo que puedo ayudar a otras personas con mi trabajo voluntario”. Ella afirma que “el hecho de ayudar a otras personas y hacer una diferencia en estos tiempos difíciles” la motiva a seguirse involucrando con el programa de entrega de comida.

Voluntarios preparando cajas de comida con frutas y verduras

Voluntarios preparando cajas de comida con frutas y verduras

Maira sabe por experiencia propia lo importante y útil que es el programa de entrega de comida para las familias que están tratando de cubrir sus necesidades durante esta crisis. Su mamá perdió su trabajo durante la pandemia y dice que “significa mucho que otras personas se interesen por nosotros”. Maira se involucró como voluntaria a través de su cuñada Mayra Torres, quién es la organizadora de vivienda de Living Cully. Maira dice “Yo he visto como ella (Torres) disfruta lo que hace y que de hecho es divertido ayudar a la gente y empacar las cajas”. Otra voluntaria, Yareli González, se involucró cuando “vio que no había suficiente gente queriendo ayudar a la comunidad”, y desde que comenzó a ser voluntaria le ha hecho feliz saber que la gente que necesita recibir comida no van a pasar hambre gracias al programa. Yareli también recibe cajas de comida, y dice que ha sido “una gran bendición” el poder recibir la comida del programa y que “no hay palabras” para describir el impacto que ha tenido en la vida de su familia.

El programa de entrega de comida ha sido un esfuerzo verdaderamente comunitario que ha creado lazos más fuertes entre los residentes, y les ha permitido ayudar a aquellos que tienen necesidad, así como ayudarse a sí mismos. Las conexiones y relaciones que Living Cully ha hecho a través de este programa nos ayudarán a servir más profundamente a la comunidad. Y lo que es aún más importante, la comunidad se ha unido para ayudarse durante esta crisis, y ha formado relaciones que serán más fuertes cuando se acabe la pandemia.

Puedes ayudar a este programa de dos maneras:

  1. Necesitamos dinero para comprar suministros y proveer de almuerzo y estipendios modestos a los voluntarios. Si puedes ayudar, comunícate por correo electrónico con Raina Brot-Goldberg: rainabrot-goldberg@verdenw.org
  2. ¡Estamos buscando voluntarios regulares! Si pueden colaborar con nosotros los viernes por la mañana, por favor llenen esta forma y nos comunicaremos con ustedes.

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