Residentes de Casas Móviles en Oak Leaf al Borde de una Victoria Histórica para Salvar sus Hogares

Por Cameron Herrington, Living Cully

En Enero de 2016, las 30 familias que viven en el Parque para Casas Móviles en Oak Leaf (4556 NE Killingsworth), comenzaron a escuchar rumores sobre la posible venta o cierre de su parque y por lo cual podrían ser evacuados. Imposibilitados para comprar una casa en cualquier otro lugar en Portland – y enfrentando otros retos significativos como la discapacidad, la enfermedad y la vejez – muchos temían que se convertirían en personas sin hogar. Cinco meses después, los residentes de  Oak Leaf se encuentran en la cúspide de lograr lo que nadie más en Portland a hecho jamás: comprar el parque por si mismos y operarlo como una cooperativa propiedad del residente y de vivienda económicamente accesible.

En medio de rumores sobre el inminente cierre del parque, y con el apoyo de organizadores de Living Cully and St. Charles Church, los residentes de Oak Leaf llevaron a cabo una compleja y ambiciosa campaña para salvar sus hogares. Los líderes de Oak Leaf fueron primero introducidos con Living Cully  través de su vecino de enfrente, Dennis Karas, quien regularmente reparte donaciones de comida en Oak Leaf por lo que entabló amistades con los residentes mucho antes de que las amenazas de venta del parque salieran a la luz.

Los organizadores rápidamente aprendieron que el dueño fuera del estado de Oak Leaf probablemente había violado la ley de Oregón al no dar aviso a los residentes sobre su intención de vender el parque. Poco después, el dueño confirmó que en efecto, tenía en marcha una acuerdo de venta con un desarrollador y planeaba echar a las 30 familias y cerrar el parque. Las heroicos abogadas Megan Dorton and Christina Dirks del Servicio de Asistencia tomaron el caso y se prepararon para tomar acciones legales en contra del dueño – trabajando en conjunto con los residentes para documentar años de prácticas de gestión cuestionables y cuestiones de salud y seguridad desatendidas, además de la pendiente venta ilegal.  Mientras tanto, CASA Oregón, otra organización sin fines de lucro se unió para ayudar a los residentes a hacer oferta de compra competitiva para comprar el parque.

Con esta estrategia de “persuasión o imposición”, los residentes esperaban convencer al dueño de aceptar con el fin de evitar una demanda. A pesar de todo, a principios de Junio y eso fue exactamente lo que sucedió; el dueño firmó la oferta de compra con CASA en nombre de los residentes de Oak Leaf. Pero un pequeño problema se mantuvo, los residentes no podían pagar el precio de compra.

Los residentes de Oak Leaf estaban cerca de $1.5 millones por debajo de lo que necesitaban para comprar el parque y hacer las reparaciones mejoras de infraestructura necesarias. Los residentes y sus aliados del Equipo de Acción de Living Cully (CHAT!), St. Charles Church, otras comunidades de fé en el Noreste de Portland y miembros del barrio de Cully asistieron en masa a dos audiencias del Concejo Municipal en Mayo y Junio, solicitando que los ingresos provenientes del nuevo Impuesto sobre Productos de construcción de la Ciudad fueran usados para “Salvar el Oak Leaf!”. En la audiencia del 16 de Junio,  los más de 100+ defensores que se reunieron en el Ayuntamiento estallaron en aplausos cuando el Comisionado de Vivienda Dan Saltzman anunció que preservar Oak Leaf sería el primer proyecto que él recomienda a financiar con el nuevo impuesto sobre los ingresos. Saltzman dijó a la multitud reunida, de una u otra forma “vamos a lograr que se haga”.

Ahora CASA tiene un par de meses para analizar por completo la propiedad, investigar las reparaciones necesarias, ayudar a los residentes a adquirir préstamos que serán reembolsados con sus rentas mensuales y alinear el financiamiento del Ayuntamiento y de otras fuentes. Mientras tanto, los residentes están trabajando duro para formar una cooperativa legalmente reconocida, seleccionar su primer consejo de administración y se preparan para tomar posesión del parque.

Los residentes del Oak Leaf y de Living Cully extienden un sincero agradecimiento a todos los vecinos y defensores del barrio de Cully que fueron a la audiencia del Ayuntamiento, que mandaron correos electrónicos, que firmaron el banner “Salven El Oak Leaf”  o que hicieron llamadas telefónicas presionando al Ayuntamiento a ayudar a salvar el parque. Tu apoyo y solidaridad han sido fundamentales, y continuarán siendo necesarios mientras los residentes se sumergen en la larga tarea de mejorar y gestionar su parque. Mantener los ojos bien abiertos para una invitación a una celebración de la comunidad una vez que el acuerdo sea definitivo y el parque esté oficialmente en manos de los residentes!

 

 


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